En un tiempo donde la arquitectura se ve constantemente interpelada por la velocidad, la moda y la tecnología, conversar con estudios que cultivan la pausa, la reflexión y la profundidad resulta no solo necesario, sino inspirador. En esta ocasión, tenemos el privilegio de dialogar con Fran Silvestre Arquitectos, un estudio con sede en Valencia, fundado en 2005 por el arquitecto Fran Silvestre. El estudio está formado por un equipo multidisciplinar de profesionales que realizan proyectos residenciales, culturales, corporativos y públicos a nivel nacional e internacional.
Lejos de entender el minimalismo como una estética superficial, su arquitectura lo asume como una ética proyectual: una forma de pensamiento que busca depurar lo accesorio para que emerja lo esencial. En esta entrevista, exploramos junto a ellos cuestiones fundamentales como la relación entre luz y espacio, la elección consciente de materiales, la sostenibilidad, la tecnología y el impacto emocional de los entornos habitables. Todo, desde una mirada que combina sensibilidad, rigor y una inquebrantable fidelidad a una visión propia de la arquitectura como ocio y legado.
1. ¿Cómo definen el concepto de «minimalismo» en su trabajo y qué objetivos buscan al aplicarlo en sus proyectos?
El minimalismo para nosotros no es un estilo, sino una manera de pensar. Es una búsqueda de claridad, de síntesis, de eliminar lo superfluo para que lo esencial se exprese con más fuerza. Tiene que ver con proyectar desde la precisión, desde el orden, desde la luz. No es un fin, es una consecuencia de entender la arquitectura como un acto de respeto: hacia el lugar, hacia quienes la habitan y hacia el tiempo que la atraviesa.
2. ¿Cómo trabajan la luz y el espacio para crear ambientes que se integren armoniosamente con la naturaleza?
La luz es vital en nuestra arquitectura, porque tiene la capacidad de transformar lo estático. Nos interesa cómo una arquitectura aparentemente inmóvil se activa con el paso de las horas, cómo la luz la recorre, la revela y la oculta. Esa variación constante es la que convierte un espacio en una experiencia.
3. ¿Qué factores consideran al seleccionar los materiales y cómo influyen en la estética y funcionalidad de los espacios?
Elegimos materiales naturales por su honestidad y su capacidad de envejecer con dignidad. Nos interesa cómo se comportan térmicamente, su durabilidad y también su expresión. La arquitectura debe resistir el paso del tiempo, tanto funcional como visualmente. Por eso proyectamos con materiales sobrios, que no llamen la atención por sí mismos, sino que potencien el conjunto y lo hagan habitable.
4. ¿Qué los motiva a utilizar formas geométricas simples y cómo logran equilibrar simplicidad con sofisticación?
Trabajamos desde la claridad geométrica porque nos permite ordenar, sistematizar, afinar el proyecto. Pero la verdadera sofisticación está en el detalle, en la proporción, en el control de lo sutil. Esa aparente simplicidad esconde muchas decisiones complejas. Lo que nos interesa no es el impacto inmediato, sino la serenidad que se percibe cuando todo está en su sitio.
5. ¿Cómo incorporan principios ecológicos en sus proyectos sin comprometer el diseño?
La sostenibilidad no es una opción, es una responsabilidad. Desde el inicio del proyecto se toman decisiones que inciden directamente en su comportamiento ambiental: orientación, ventilación cruzada, materiales duraderos. A veces la arquitectura se proyecta para perdurar, otras para ser reversible. En ambos casos, diseñamos con conciencia del impacto, del tiempo y de los recursos.
6. ¿Cómo logran crear espacios que no solo sean funcionales, sino también emocionalmente impactantes?
Nos interesa la emoción silenciosa, la que no se impone. La arquitectura que proponemos busca conmover a través de la luz, de los materiales, de la proporción. Un espacio puede cambiar tu estado de ánimo sin necesidad de ser complejo o recargado. Lo emocional no es algo añadido, es una consecuencia de proyectar desde lo esencial.
7. ¿Cuáles son los desafíos más comunes que enfrentan al diseñar en entornos naturales o urbanos complejos, y cómo los abordan?
Cada lugar plantea una pregunta distinta. En terrenos inclinados, trabajamos con la topografía, no contra ella. En entornos urbanos, la respuesta es más silenciosa, más contenida. En ambos casos, la arquitectura surge como una respuesta precisa, sin artificio, tratando de escuchar lo que el lugar pide y lo que las personas necesitan.
8. ¿Cómo logran mantenerse fieles a su visión personal y evitar caer en modas pasajeras?
Valoramos mucho la continuidad. La arquitectura que nos interesa no pertenece a una época, sino a una actitud. Proyectamos pensando en cómo se verá el proyecto dentro de veinte años. No nos interesa seguir una tendencia si no aporta algo al contenido. Si el mensaje es claro, la forma no necesita disfrazarse.
9. ¿Cómo influyen las tecnologías digitales y las herramientas de modelado 3D en su proceso creativo?
Las herramientas digitales son esenciales, sobre todo en fases técnicas. Pero seguimos pensando con las manos. Las maquetas nos permiten entender el proyecto como un objeto real desde el inicio. Nos permiten equivocarnos rápido, corregir pronto. Lo digital nos aporta precisión, pero el pensamiento manual nos conecta con la esencia del proyecto.
10. ¿Qué innovaciones esperan ver en la arquitectura que puedan transformar el trabajo de los arquitectos en los próximos años?
Creemos que el futuro pasa por la relación entre arquitectura y salud. La neuro arquitectura, por ejemplo, nos permite medir el impacto emocional de los espacios. Esto abre una nueva manera de proyectar, con herramientas científicas, pero también con más sensibilidad. La experiencia del usuario estará cada vez más en el centro del diseño.
11. ¿Qué consejo darían a los nuevos arquitectos que comienzan su carrera?
Que sean ellos mismos. Todo lo demás ya existe. Que no busquen parecerse a nadie, sino entender qué quieren contar con su arquitectura. Y que trabajen desde el compromiso con el lugar, con el oficio, con la gente. El estilo es una consecuencia; lo importante es tener algo que decir y saber comunicarlo.
12. ¿Hay algún aspecto o proyecto reciente que les gustaría destacar?
Estamos desarrollando nuevos proyectos dentro del sistema NIU Houses, una forma de construir más precisa, más rápida y más sostenible. Cada vivienda se basa en un sistema común, pero se adapta al lugar, al cliente, al entorno. Lo interesante es que, siendo un sistema, nunca hay dos iguales. Cada proyecto se trabaja como si fuera el primero, el último y el único.
Esta conversación con Fran Silvestre Arquitectos nos confirma que la arquitectura puede ser, a la vez, técnica y poética; sobria y conmovedora; precisa y profundamente humana. Su obra se edifica sobre un pensamiento claro y sereno, que entiende el espacio no como una acumulación de formas, sino como un acto de síntesis donde la luz, el material y el entorno dialogan en equilibrio.
Esa búsqueda constante de atemporalidad, de rigor constructivo y de belleza esencial encuentra un punto de conexión natural con la filosofía de Compac ®. Porque al igual que en este estudio, en Compac ® creemos en los materiales que perduran, en la innovación al servicio del diseño y en la capacidad de las superficies para transformar la experiencia del espacio. Celebramos, por tanto, una arquitectura que no solo se ve, sino que se siente; una arquitectura que, como la de Fran Silvestre Arquitectos, convierte lo esencial en extraordinario.